No te angusties, que aún existo…
aunque intentes abrazarme sin lograr tu cometido,
aunque creas que tu vida ya no tiene más sentido,
no te angusties, que aún existo…
Transfigurado ¡no extinto! gozando lo prometido,
entre ángeles que glorían el haberme recibido,
transitando jubiloso por la luz, de lo divino,
ya sin penas, ni dolores, “Él” me ha reconstituido,
¡no te angusties que aún existo!.
Y cuando la parca aceche tu frágil cuerpo, rendido,
compungido el pecho sienta oscuridad y vacío,
cuando ya las esperanzas claudiquen sintiendo el frío,
creyendo no hay retorno, ya todo, ha concluido,
habremos de reencontrarnos, en la luz del cielo unidos,
descubriendo tú también que en verdad ¡no me había ido!
simplemente regresé, al lugar donde he partido.
14/06/2019
http://www.sercan455.wordpress.com
La vida, nuestra vida, no es ni más ni menos que un soplo, un simple soplo en lo que es la historia de la humanidad. Aquellos que tenemos fe, sabemos que estamos de paso, que la muerte no venció a la vida, que la vida es mucho más que está experiencia terrenal, que volveremos a reencontrarnos, ya en la inmensidad del Creador, ya con la eternidad como herencia.
Precioso y muy cierto. Un saludo cordial en la distancia.
Me gustaLe gusta a 2 personas
Gracias Ingrid!!! Así es para aquellos que vivimos nuestra fe! Abrazos
Me gustaMe gusta
Hermoso, lo estoy leyendo en el momento más indicado y me hace bien leerlo. Bendiciones
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias sahory, me alegra haber sido instrumento de Dios. Bendiciones también para ti abrazos.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias que tenga un lindo día, bendiciones
Me gustaLe gusta a 1 persona