Me voy
para no volver…
para no pisar los mismos pasos,
para no buscar atajos,
para alejarme de ti.
Para empezar a vivir,
y demostrarme que aún valgo,
caí en el desarraigo
que nada soy para ti.
Para empezar a creer,
para odiar aunque no quiera,
para encontrar la manera
de poder sobrevivir.
¡Para volver a ser yo!
para cuidarme y amarme,
para ser mi misma madre
aunque tenga que sufrir.
Dejando de mendigar,
besos y abrazos vencidos
de un amor que sometido
¡nada tiene por vivir!
17/09/2022
El maltrato, la violencia de género, de ambas partes, muchas veces, no solo es física o verbal. La indiferencia, la apatía también es violencia. También daña. Es sano en todos estos casos tomar distancias, convertimos en padres de nosotros mismos, para amarnos como ellos nos amaron. Para protegernos, para salvaguardarnos. ”El amor que se mendiga, no es amor”
¡De acuerdo contigo!… Aprender amarnos a nosotros mismos es fundamental, ser padres de sí mismos para valorarnos y darnos nuestro lugar, esto es amor propio o también lo llamamos dignidad…
Saludos amigo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Exacto amigo! tenemos que aprender a amarnos más. Eso no significa no amar al prójimo. Significa no amar al prójimo más que a ti mismo. Abrazos
Me gustaLe gusta a 1 persona
Soy amiga! femenina… Esto entra en un cuadro muy polémico… Porque si bien es cierto, el verdadero amor, se niega así sí mismo, renuncia a todo, sin importar si le aman o no, no le interesa recompensas, el perfecto amor todo lo da… Este es otro punto de vista, ni modo… «C’est la diversité des avis». Saludos.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Sí amiga anydey , ya sé, escribí mal!! ademas veo tu foto, imposible equivocarme pero… me equivoqué disculpas.E n cuanto a lo polémico estas citando 1 corintios 13 1-10, y es así: Si yo hablara lenguas humanas y angélicas, pero no tengo amor, he llegado a ser como metal que resuena o címbalo que retiñe. Y si tuviera el don de profecía, y entendiera todos los misterios y todo conocimiento, y si tuviera toda la fe como para trasladar montañas, pero no tengo amor, nada soy. Y si diera todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si entregara mi cuerpo para ser quemado, pero no tengo amor, de nada me aprovecha. El amor es paciente, es bondadoso. El amor no tiene envidia; el amor no es jactancioso, no es arrogante. No se porta indecorosamente; no busca lo suyo, no se irrita, no toma en cuenta el mal recibido. El amor no se regocija de la injusticia, sino que se alegra con la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. El amor nunca deja de ser. Pero si hay dones de profecía, se acabarán; si hay lenguas, cesarán; si hay conocimiento, se acabará. Porque en parte conocemos, y en parte profetizamos; pero cuando venga lo perfecto, lo incompleto se acabará. Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, razonaba como niño; pero cuando llegué a ser hombre, dejé las cosas de niño. Porque ahora vemos por un espejo, veladamente, pero entonces veremos cara a cara. Ahora conozco en parte, pero entonces conoceré plenamente, como he sido conocido. Y ahora permanecen la fe, la esperanza, el amor: estos tres; pero el mayor de ellos es es el amor. Abrazos y disculpas por el error tipeo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Amén!!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Totalmente de acuerdo con tu bello poema, amigo. Tenemos que querernos nosotros mismos y así podremos dar a los demás amor. Un abrazo!!!!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Sí, sí. Debemos aprender a amarnos a nosotros primeros, para saber como debemos amar a los demás. Abrazo amiga y buena semana
Me gustaLe gusta a 1 persona